Dicha actitud se refleja además de la vestimenta, en el carácter, la jerga, donde impera mucho el vocabulario musical y técnico acerca de los instrumentos típicos de una banda de heavy metal, calidad sonora, etc
Dentro de esa jerga podríamos añadir algunos gestos, ademanes, señas, posturas y simbología (lenguaje no verbal), como puede ser el distintivo y expandido símbolo de la mano cornuta: dedos índice y meñique estirados, recogiendo los dedos corazón, pulgar y anular y que generalmente algunos lo hacen en los conciertos y que fue instituido y popularizado por Ronnie James Dio durante su época con Black Sabbath,96 quien recreaba la seña nacida de la tradición de un pueblo italiano en el que vivía su abuela (del mismo origen) para ahuyentar los malos espíritus y echar malas vibras, este gesto es llamado “malocchio”. A Gene Simmons, bajista y vocalista de la banda Kiss, también se atribuye el ser el primero en hacer el gesto durante un concierto. Se puede apreciar en la portada del Love Gun, de 1977 (en la cual aparece haciendo la misma seña, salvo a la forma de los pulgares).,97 sin embargo es Ronnie James Dio el primero en difundirlo a partir de la tradición de su abuela italiana.
tra serie de patrones gestuales pueden ser el sacudir la cabeza de manera violenta (independientemente de la longitud del cabello) al ritmo de la música. Dicho gesto ha producido el término headbanger (literalmente ‘sacudidor de cabeza’), que define típicamente al fan de heavy metal sacudiendo la cabeza con violencia al ritmo de la música en la primera línea de un concierto. Alice Cooper con cierta ironía y humor define al headbanger como «un movimiento místico que autoinduce un estado de trance excitado». Otro tipo de gestos y ademanes aparecen de la mano de la música
Específicamente, es un símbolo que fue usado repetidamente por Ronnie James Dio cuando entró en Black Sabbath, según sus propios dichos, su abuela solía curarle (como muchas abuelas tanas), el mal de ojo o llamado "malocchio" con el símbolo de los cuernos o mano cornuta, es algo muy conocido, es una superstición que cree alejar el mal de un cuerpo.
Mi abuela también me curaba así el mal de ojo, me hacía unos cuernitos sobre la frente con el índice y el meñique y con el pulgar se sostenía el resto de los dedos abajo, mientras con un dedo de la otra mano soltaba gotas de aceite sobre un plato con agua, si el aceite hacía grandes gotas la ojeadura era leve, pero si las gotas eran diversas y pequeñas, me había agarrado flor de ojeadura y vaya a saber que poción hacía para sacarmela. Por ahí al caminar solía decir que si me miraban mucho (admirar) me ojeaban. Y la gente que te envidiaba también te ojeaba, o las personas con mirada profunda o de color de ojos negros y miles de cosas... entonces, siempre había una abuelita tana que te curaba la ojeadura.
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